CIRUGÍA DE LABIOPLASTIA
El crecimiento de los labios menores de la vulva se inicia durante el desarrollo puberal. En algunos casos, este crecimiento puede resultar excesivo y le ponemos el nombre de hipertrofia de labios menores.
No existe una medida estándar que determine cuando existe una hipertrofia o crecimiento excesivo. En general, cuando estamos de pie, los labios menores deberían quedar recogidos en gran medida por los labios mayores.
Cuando esto no es así, en algunos casos y no en todas las pacientes, puede dar lugar a molestias como roce, sensación de ocupación, molestias con las relaciones sexuales… Después del parto, la disminución del edema vulvar puede provocar un adelgazamiento de labios menores y mayores, que desencadena un inicio de los síntomas.
La hipertrofia de labios menores puede ser aislada, o implicar a su vez una hipertrofia del capuchón del clítoris. Estos hallazgos nos determinarán la técnica quirúrgica que vamos a elegir, ya que en algunos casos deberemos tratar el exceso de piel del capuchón.
La labioplastia consiste en retirar el exceso de labios menores que sobresale más allá de los labios mayores. En ningún caso es una amputación de labios, puesto que debemos preservar su función de recogida del flujo vaginal y protección de la entrada de la vagina.
La sensibilidad erógena no se modifica con la realización de esta cirugía.
La labioplastia puede realizarse con anestesia local, de forma ambulatoria y sin ingreso hospitalario. No es necesario realizar un reposo domiciliario y podemos volver a la vida normal a las 24-48 horas.
Los puntos que se colocan el día de la cirugía se caen solos a partir de los 10 días. Hasta ese momento, podemos hacer una ducha diaria y aplicar una pomada específica una vez al día. Es muy importante realizar una buena compresión de la vulva los primeros días tras la cirugía y aplicar frío local durante los primeros 10-12 días. Se recomienda no realizar ejercicio físico hasta la caída completa de los puntos, así como reposo sexual durante 3 semanas.
El resultado final de la cirugía lo veremos a partir de los 3 meses y hasta el año de la cirugía podemos identificar cambios progresivos.
Tras la realización de la cirugía, los labios menores no mostrarán un nuevo crecimiento. Los labios menores, mayores y canal vaginal, perderán volumen de forma progresiva con la llegada de la menopausia.
Las principales complicaciones que pueden aparecer son el sangrado postoperatorio y la dehiscencia de la herida. Estas complicaciones aparecen en muy baja frecuencia.
Para disminuir su aparición se recomienda dejar de fumar, control estricto en pacientes diabéticas, importante compresión las primeras 12 horas y evitar esfuerzos en el postoperatorio inmediato.
El objetivo de la cirugía va más allá de la mejora estética y busca el impacto en la calidad de vida de nuestras pacientes.
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Dra. Marta Yuste
